El mejor ingrediente para que nuestros hijos consigan sus logros es decirles que” lo intenten y que si lo intentan seguro que lo van a conseguir” si ya estamos creando unas expectativas de logro nuestros hijos se verán en la meta, ya que lo que se consigue de esta manera es que el niño crea en sí mismo.
La estima hay que potenciarla desde el principio, pero es quizás en la adolescencia cuando los jóvenes pueden pasar de estar genial a estar fatal y todo esto a lo largo de un día, esto es debido a que están buscando su identidad “¿quién soy?” y valor para él mismo y para los demás ¿cuánto valgo?. Y es a través de su conocimiento interior, la única forma que tienen de jugar su papel en el mundo y ver el futuro.
Es en este momento cuando los padres tienen que apuntalar todo aquello que los chavales hagan bien; patinar, correr, cantar, soñar con ser un gran científico o músico, cocinar, saber escuchar, etc.
Todos los chavales tienen ciertas capacidades que les hacen distintos y únicos, algo por lo que valorarse, algo en lo que es el mejor y si parece que no lo hay pues se busca, ya que si no se les valora o no se busca algo por lo que se puedan valorar, lo van a buscar ellos pero en el sentido contrario, con conductas disruptivas o de llamadas de atención en todos los sentidos, que pueden ir desde:
- Contestaciones a los padres.
- Dejadez a nivel personal.
- Estéticas radicales.
- Problemas de alimentación.
- Fracaso escolar.
- Consumo de tóxicos.
- Promiscuidad sexual.
Y si los padres comparan, o les catalogan, ellos van a seguir haciendo más de lo mismo, respondiendo con creces a todas las expectativas de los padres .
“Tú hermano es mejor que tú, eres un vago, como sigas así no llegarás a nada”.
Si sólo se le dice lo que hace mal, va a pensar que no tiene nada bueno, por tanto hay que ver que puede que no saque buenas notas pero a lo mejor toca muy bien la guitarra, si vamos compensando y no centrándonos solamente en lo que hace mal, conseguiremos que también se potencien las cualidades de nuestro hijo, ya que están obteniendo un reconocimiento por sus méritos.
FÓRMULAS PARA POTENCIAR LA AUTOESTIMA
- El elogio, por lo que ha conseguido o por el esfuerzo realizado y no ridiculizar.
- Decirles cosas agradables.
- Instigarles a que cuiden su aspecto personal sino lo hacen.
- Valorar sus opiniones, de acuerdo con la edad, aunque la decisión la tomen los padres.
- Ayudarles a tolerar frustraciones (no siempre se consigue lo que uno quiere y por eso no pasa nada).
- Ayudarles a identificar sus emociones.
- Interesarse pos sus cosas tanto en el aspecto escolar como en el personal.
- Darles valor dentro de la familia.
- Evitar la sobreprotección.
- Ayudarles a proponerse metas.
- Reforzar las cosas que hacen bien.
- Ayudarles a construir una imagen clara de sus rasgos a todos los niveles tanto físicos como intelectuales.
- Hacer comparativas ante cosas que hayan conseguido. Pero ojo la comparación es solo con él mismo no con los demás.
- Potenciar su autonomía personal, que en la medida de lo posible vayan haciendo cosas por sí solos.
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