Cuando sentimos equilibrio interior, somos más conscientes de nosotros mismos, de nuestra relación con los otros, somos más autónomos, independientes, tenemos determinación e iniciativa para guiar nuestra vida.
Algunos aspectos a tener en cuenta para mantener nuestro equilibrio son:
- Acepta lo que sucede, pelearte con la realidad no sirve de nada. Si aceptas, dentro de la realidad que vives, lo que no depende de ti y cambias lo que si depende, podrás tomar desde ahí una actitud de apertura a lo que te trae la vida.
- Vive el momento presente, tampoco hay otra cosa. Mirar al pasado deprime a algunas personas, porque no les permite avanzar y mirar al futuro a algunas personas les produce ansiedad. La respiración, nos centra en el presente, que es lo único que tenemos.
- Deja de ser dependiente. Cuando dejas de hacer cosas que te hacen estar bien, para hacer lo que los demás digan y tener su aceptación, te estás perdiendo de ti mismo y te estás haciendo daño.
- Toma las riendas de tu vida. Tú eres quién decide en qué te quieres enfocar, qué cambios quieres hacer, qué tipo de pensamientos permites, en definitiva deja la palabra y pasa a la acción.
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