Que un chico joven venga a terapia, cada vez es más usual. Los chicos jóvenes están abiertos, cuando se dan cuenta que necesitan ayuda, a buscar la mejor manera de resolver las situaciones que viven, estos son jóvenes que necesitan expresar sus emociones y que no ven en este gesto un símbolo de fragilidad.
Cuando un hombre muestra sus emociones, llora, habla de cómo se siente es un indicador de madurez, de auto contacto, de inteligencia emocional.
- Hay hombres que se quedan para sí las cosas, porque no les educaron de esta manera, porque no les enseñaron, porque piensan que «si ven mi vulnerabilidad los otros pueden dejar de verme con los ojos que me ven actualmente”.
- Algunos hombres se guardan muchas cuestiones emocionales, es como si no se permitieran expresarse, y no saben hacer con lo que sienten, desde aquí la descarga emocional puede ser confusa.
Por tanto, ya toca que los chicos se permitan sentir y expresarse, que se puedan quitar la máscara y conectar con la parte vulnerable, conectar con ellos mismos, quitar creencias y poder estar más en lo emocional.
Es el momento de escuchar a los hombres de nuestras familias y si les cuesta, animarlos a que se puedan expresar.
Antes de permitir que te desborden situaciones de la vida cotidiana: un despido, la muerte de un ser querido, un cambio inesperado… puedes hacer algo con los aspectos emocionales.
De lo que se trata es que se normalice el sentir, y el expresar el sentir.
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