¿Qué entendemos por infidelidad?
Este es un tema que hemos tratado en ocasiones anteriores en este blog, y no es fácil definirlo, podemos decir que las parejas establecen un sistema de convivencia, con una serie de ”normas”, que no están establecidas explícitamente, pero mediante ellas lo que intentan es establecer los pilares de la relación y hacer que dure el mayor tiempo posible.
Por tanto podemos entender como infidelidad, la violación o traición de un acuerdo al que se llegó mediante un convenio exclusivo entre dos, independientemente de si hubo o no algún contrato formal ante la ley.
¿Tendemos a la infidelidad?
Debido a que la gente lo suele ocultar, a veces las estadísticas no dan cifras claras. Sin embargo, algunos estudios apuntan a que, aproximadamente, en España el 30% de la población es infiel, otros añaden además que estamos a la cabeza de países con mayor tasa de infidelidad.
Independientemente de los datos, la clave de la infidelidad está en la tendencia a buscar fuera aquello que no se tiene en casa, por tanto existe una carencia en la relación. E incluso entendiendo esto, cuando se descubre la infidelidad, se tiende a creer que el que rompe el acuerdo es el culpable y el otro la víctima.
Causas
- El deterioro de la pareja debido a la rutina. Cuando se descuida el tiempo en común, y cada uno se instala dentro de su día a día, y el uno empieza a ser invisible para el otro, es probable que la mirada de un miembro de la pareja se pose en un tercero.
- Una vida sexual insatisfactoria. El sexo es otra forma de comunicación dentro de la pareja, si este es deficitario, se puede buscar fuera.
- Búsqueda de nuevas sensaciones. Cuando se acaba el enamoramiento, hay personas que no asumen este estado y necesitan volver a sentir las emociones intensas que te produce esa etapa inicial de una relación.
- Crisis personales. En determinados momentos de la vida, cuando parece que lo que está a tu alrededor se desmorona, el encontrar a un tercero hace que la persona reafirme su autoestima.
- Insatisfacción emocional. Es más frecuente en mujeres y se debe a que siente una falta de amor y un abandono afectivo de su pareja.
- La soledad en la pareja junto a la atracción física por otra persona puede desembocar en una infidelidad.
- La evolución divergente. Se suele dar en parejas que se conocen desde muy jóvenes, cada uno va evolucionando y madurando a su manera y en ocasiones de manera independiente.
¿Qué puede hacernos pensar que nuestro chico es infiel?
La infidelidad masculina es más fácil de detectar, ya que los argumentos que suele dar para justificarse son flojos y un tanto incoherentes.
- Habla menos de lo habitual (por muy poco que hable).
- Recibe llamadas o mensajes que intenta ocultar.
- Cambia sus rutinas y horarios.
- Cambia de gustos de repente.
- Cuida más de lo habitual su vestuario.
- Habla de temas que anteriormente no dominaba.
- En ocasiones se muestra más tierno y atento.
- Rechaza mantener relaciones sexuales.
- Los motivos que inventa para estar fuera de casa no son creíbles.
¿Qué puede hacernos pensar que nuestra chica es infiel?
La infidelidad femenina es más difícil de detectar, ya que la mujer suele cuidar mucho lo que cuenta para que todo case perfectamente.
- Muestra una alegría inmotivada.
- Sale más de lo habitual.
- Pérdida del deseo sexual con la pareja, y rechazo.
- Llamadas y mensajes que intenta ocultar.
- Pasa demasiado tiempo en el trabajo.
Cómo evito la infidelidad
- Mantener una buena comunicación, si mantienes una vida plena y satisfactoria con todas las necesidades cubiertas, no necesitarás buscar nada fuera.
- Trabajar diariamente para vencer la rutina, debemos evitar la monotonía en la relación, ya que en ocasiones el día a día nos vence y buscamos otros alicientes.
- Hacer sentir importante a tu pareja.
- Buscar actividades comunes y momentos en los que compartir.
- Cuidar los detalles.
- Escuchar e intentar comprender a la otra persona.
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